lunes, mayo 24

¿Quién es Jesucristo? ¿Es Jesús el Dios todopoderoso?



Muchas personas religiosas aseguran que Jesús es Dios. Otras sostienen que Dios es una Trinidad, dogma según el cual “Dios es el Padre, Dios es el Hijo, Dios es (también) el Espíritu Santo; y, sin embargo, no son tres dioses, sino un solo Dios”. Se afirma que “las tres personas son entre sí coeternas y coiguales” (El Magisterio de la Iglesia). ¿Están en lo cierto tales opiniones?

Jehová Dios es el Creador (Revelación 4:11). Él no tuvo principio y no tendrá fin; además, es todopoderoso (Salmo 90:2). En cambio, Jesús sí tuvo principio (Colosenses 1:15, 16). Refiriéndose a Dios como su Padre, Jesús dijo: “El Padre es mayor que yo” (Juan 14:28). También explicó que había cosas que ni él ni los ángeles sabían, y que solo su Padre conocía (Marcos 13:32).



Además, Jesús pidió a su Padre: “Que no se efectúe mi voluntad, sino la tuya” (Lucas 22:42). ¿A quién dirigió estas palabras si no fue a una Persona superior a él? Lo que es más, Jesús no se resucitó a sí mismo, sino que fue Dios quien lo levantó de entre los muertos (Hechos 2:32). Es obvio, entonces, que el Padre y el Hijo no eran iguales antes de que Jesús viniera a la Tierra ni durante su vida terrestre. Pero ¿y después de que Jesús fue resucitado y ascendió al cielo? En 1 Corintios 11:3 leemos: “La cabeza del Cristo es Dios”. En realidad, el Hijo siempre estará en sujeción a Dios (1 Corintios 15:28). De modo que las Escrituras muestran que Jesús no es el Dios todopoderoso, sino el Hijo de Dios.

La llamada tercera persona de la Trinidad —el espíritu santo— no es en realidad una persona. El salmista oró a Dios diciendo: “Si envías tu espíritu, son creados” (Salmo 104:30). Este espíritu no es Dios, sino la fuerza activa que él envía o utiliza para realizar lo que desea. Mediante este espíritu, Dios creó los cielos, la Tierra y todos los seres vivos (Génesis 1:2; Salmo 33:6). Dios también usó su espíritu santo para inspirar a los hombres que escribieron la Biblia (2 Pedro 1:20, 21). Como vemos, la Trinidad no es una doctrina bíblica.* Más bien, las Escrituras enseñan que “Jehová nuestro Dios es un solo Jehová” (Deuteronomio 6:4).

El buen samaritano

Jesús y la mujer samaritana